La Suite es un regalo de la masía para que gocéis de un merecido descanso después de un largo día lleno de emociones. Se trata de la habitación más especial de la casa. Orientada cara sur, desde su hermosa terraza pueden contemplarse impresionantes despertares, donde las luces doradas y los cantos de los pájaros nos recuerdan la abundante vida en el bosque.

Durante vuestro día, la Suite acoge a la novia para todos los preparativos: dejarse cuidar el pelo y el rostro, sentir emociones a flor de piel, ponerse (por fin) ese vestido tan especial, compartir estos instantes con las personas más importantes, salir a la terraza, sonreír y respirar aire fresco…

Después del descanso, a la mañana siguiente, podréis degustar un delicioso desayuno eco y preparado con mucho cariño en el antiguo Pajar de la masía, y seguir compartiendo las anécdotas de vuestro gran día.

La masía dispone de 20 habitaciones. Todas ellas son distintas, creadas con mucho mimo y a fuego lento por nuestra Familia y con la ayuda de artesanos locales. Destacamos la gran calidad de sus materiales y fibras naturales, sostenibles con el medio ambiente. En cada una de ellas habita una obra de arte o un elemento especial que la hace única: un piano rojo, un mural de Paula Bonet, los dibujos de nuestro abuelo…

En la antigua masía hay las primeras 8 habitaciones que creamos, llenas de historia y autenticidad. En la zona de las Oliveras se encuentran las otras 12 habitaciones que construimos posteriormente y que gozan de gran amplitud, luz y extraordinarias vistas a la naturaleza.

Descansar en las habitaciones de la masía, gozar de un delicioso desayuno saludable en el antiguo pajar, empezar el día con una clase de yoga que nos ayudará a mantener nuestra calma durante todo el día, pasear por el bosque, gozar de una barbacoa con amigos el día antes o después de la boda, relajarse en el íntimo SPA de la masía donde antiguamente se producía vino, compartir y celebrar en plena naturaleza…

Sentimos que casarse en La Garriga va más allá de gozar de un evento. La casa, sus espacios y nuestro entorno nos permiten acogeros a vosotros y a vuestra familia para vivir un bello recuerdo en vuestra vida.

La Garriga simboliza en cierta manera nuestros valores como familia: el amor por la naturaleza, la delicadeza de las pequeñas cosas, la excelencia, la entrega y dedicación, el silencio, la pasión por la cocina, la alimentación sana, la simplicidad, la constancia, el respeto por las personas y el entorno, la unión y el re-encuentro familiar.